martes, 26 de julio de 2011

Tour de France 2011.

El podio.
Nada es eterno, todo se acaba.

Se nos fue el Tour 2011 en los Alpes. Ahí estaba el col du Galibier, cumpliendo 100 años en la ronda gala, impasible, esperando la llegada de los esforzados de la ruta y resumiendo tres semanas de carrera en sus rampas. Contador venía fundido, lo que pasa es que eso, en este deporte, no se dice. Lo ven los directores del resto de equipos y lo ve Perico.

Cerquita del cielo.
  Ya pasó raspando los Pirineos, incluso se corrió el rumor de que iba a abandonar, pero el pinteño aguantó ahí, hasta que el jueves  su cuerpo dijo basta. Empezó la temporada más tarde que los demás por el tema de la chuleta vasca. En el Giro se pegó una paliza de cojones. Y, para mi lo más importante, no tiene equipo. No tiene esa refilera de chavales uniformados como él que van tirando del pelotón si hay fuga por delante (como el jueves) o se van relevando para llevar a su líder sin dar ni un pedal de más, hasta la última rampa del ultimo kilómetro. Delgado lo sabe.
Como hacía eso el Banesto!! Miguelón pasaba los puertos intermedios en trono, y en  los puertos finales siempre le quedaba el fiel escudero hasta última hora. Pero eso eran otros tiempos...
Y eso que el pundonor de Cadel Evans salvó que la sangría no fuera terminal. Vio el australiano que Alberto se retiraba de la puja y su cara se hizo poema, así es que apretó los dientes y se llevó tras de sí al francés amarillo que, milagrosa mente no, gracias a Cadel no perdió ese día ni el maillot de líder ni el apellido.
Nuestro campeón se retorcía sobre la bici y bandeaba en la carretera como nunca antes lo habíamos visto, boqueando y como pidiendo que alguien le diera el alivio de misericordia.
La dureza.
Al día siguiente, más de lo mismo. Alberto buscó un imposible y con una fuga larga mantuvo a media España en vilo, hasta que, ahora si, el trabajo por detrás surtió efecto y la minutada se convirtió en un agónico final un poco humillante para nuestro campeón.
Evans, que salvó su honor y sus posibilidades en esas dos terroríficas etapas alpinas, se plantó en la crono del sábado sabiéndose vencedor. Y a fe que no falló, subiendo a lo más alto del cajón escoltado por los hermanos Schleck. Justo vencedor, a no ser que nos llevemos una sorpresa a posteriori.
Contador, el hombre, acaba la ronda hecho añicos, porque esta carrera no perdona que los grandes lleguen justos de fuerzas. Los grandes han de llegar a punto para no sufrir ni ver su imagen dañada. Otra vez será.

4 comentarios:

  1. ME ALEGRO DE LA VICTORIA DE CADEL EVANS, se lo merecia! otra vez sera Contador, aunque los hermanos tambien tendran que triunfar algun dia!
    un saludo

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  2. La Suerte Está Echada27 de julio de 2011, 11:00

    Si, la verdad que Cadel ha sido el más regular, justo ganador!! De los hermanos, Andy ya está preparado para ganar el Tour, y creo que será un durísimo rival para Alberto el año próximo. Salud Master!

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  3. Un Contador mermado, con todo en contra, un pésimo equipo y con caídas a montones, ha sido quinto y ha dado exhibiciones. Es decir, el próximo año a poco que cambien las cosas, otra vez será el mejor.

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  4. La Suerte Está Echada28 de julio de 2011, 10:04

    Me lo creo Fernando. Eso si, deberá planificar mejor la temporada. Si quiere Giro y Tour tendrá que reforzar el equipo. Otra opción es Tour y Vuelta... ya veremos. Saludos Profe.

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